El adiós sentido

 

En estos días nos ha ocurrido  uno de los hechos más penosos que podíamos esperar. la desaparición de una de las personas más maravillosas que he conocido.. El Amo LM. Afortunadamente, al decir que ha desaparecido  no quiero señalar que haya muerto, pero sí que es prácticamente imposible que vuelva a tener relación con él, por lo menos de forma habitual.

El Amo LM fue mi Amo durante varios años. Tuvimos una relación casi perfecta en la que solo en una cosa no estábamos de acuerdo: a él le encantan las ponygirls y yo odio a las ponygirls. Nuestra relación se terminó por un equívoco. Ambos hicimos algo creyendo que era la que se debía hacer cuando, en realidad, los dos nos equivocamos. Cometimos un gran error sin darnos cuenta de que lo hacíamos.

Un tiempo después yo encontré a mi Ama Luna y él a una chica de nombre Marta, con la que inició una nueva relación. Marta ha vivido mucho tiempo con nosotras en casa de mi Ama Luna y ha llegado a ser mi mejor amiga.

Hemos salido juntas, hemos trabajado juntas, nos han azotado, castigado y sometido a las dos a la vez, pero también hemos compartido secretos, anhelos y alegrías. No sé por qué, de repente, la relación la relación del Amo LM con Marta se ha venido abajo de manera tan repentina, de un día para otro. Creo que el Amo LM se cansó y decidió terminar su vida en el BDSM. No lo digo como una crítica, sino como una respuesta coherente a una relación que no le gustaba y que, posiblemente, se le estaba escapando de las manos.

Ahora, en la soledad de mi mazmorra recuerdo cómo se reía de mí cuando le hacía preguntas tontas sobre astronomía y le inquiría si el Big Bang estaba en el centro de Universo y se expandía hacia todos lados o estaba en un extremo y se expandía solo en una dirección. O sobre los cuerpos celestes o sobre la Creación, también sobre Dios. Yo era una ignorante a su lado y él aguantaba mis razonamientos con paciencia estoica.

Hace unos días, mi Ama le ofreció a Marta quedarse con nosotras, ser una nueva esclava junto a mí. Al principio, pareció que la idea le entusiasmaba, pero enseguida recapacitó y prefirió abandonar el BDSM, renunciar a cualquier Amo que no fuese el único que había tenido y seguir su camino. Afortunadamente, nos vemos con alguna frecuencia. Al que no veré será al Amo LM. Lo imaginaré en su casa de la montaña dedicado al bricolage o a ver una buena película o a escuchar su música acompañado de una copa de ron, cuando no esté en la ciudad enfrascado en su trabajo. También lo veré en mi mente haciendo un viaje en su caravana o practicando lo que siempre ha sido su pasión: practicando la navegación en cualquiera de esos mares que nos rodean. Y entonces, pensaré que ese hombre ha sido mi Dueño., que lo he sido todo para él y que él lo ha sido todo para mí.