sábado, 20 de febrero de 2016

Una noticia triste




Hoy he conocido una triste noticia. Hoy he sabido que el Ama Neus ha muerto.
El Ama Neus fue mi Ama durante un breve periodo de tiempo, hace ya algunos años, en una relación que tuvimos que terminar por causa de la enfermedad que ya entonces padecía y que, a la postre, ha acabado con su vida.
La conocía través de otro Amo y tras hablar varias veces, decidimos iniciar una relación. Era un Ama excelente, dura y comprensiva a la vez, estricta pero justa. Yo sabía que estaba seriamente enferma pero, gracias a los tratamientos, lo iba superando, hasta que un día me dijo que debíamos terminar con todo aquello, que era incapaz de seguir.
A partir de entonces, mantuvimos el contacto por Internet. Con alguna frecuencia intercambiábamos correos y nos contábamos nuestras cosas. Supe que había vuelto a mejorar y que tenía un esclavo, pero, poco a poco fuimos distanciando el contacto hasta que un día, para intentar saber algo de ella, puse un anuncio en este blog para que, si me leía, me facilitara su dirección de correo. Lo hizo y durante un corto periodo, volvimos a escribirnos, hasta que un día, dejé de saber de ella.
Hoy, un seguidor de este blog, amigo suyo como yo, me ha escrito un correo en el que me dice que el Ama Neus murió hace ya más de un año, como consecuencia de su enfermedad.
Con enorme tristeza y desde el más profundo respeto a su persona, desde la admiración y la sumisión que le mostré una vez, escribo esta entrada como un modesto homenaje a su persona.
Descanse en paz.

martes, 9 de febrero de 2016

Lenguaje




¿Hasta qué punto es importante en una relación Amo/esclava la observancia de un lenguaje propio de sumisión? o dicho de otra forma, ¿Debe un Amo exigir a su esclava el uso de un lenguaje adecuado? ¿Y hasta qué extremo?
Supongo que cada Amo tendrá su teoría y habrá para todos los gustos, desde los que exigen que la esclava hable siempre en tercera persona, en un tono sumiso y, por supuesto, respetuoso, hasta aquello otros que únicamente exigen unas normas generales de corrección en el trato, el uso del usted y el trato de Amo o Señor.
Personalmente, he tenido ambas experiencias. Mi anterior Amo me exigía un lenguaje respetuoso, que lo tratara de usted y que me dirigiese a Él como Amo o como Señor. Mi actual Amo, sin embargo, exige que mi lenguaje sea el que corresponde a una esclava y, por tanto, a alguien que es de su propiedad. Hablar siempre como su esclava, su perra, es decir, en tercera persona y dirigirme a Él como mi Amo o mi Dueño, bajando la voz, aceptando mi inferioridad respecto a Él y mi condición de esclava a su servicio.
Debo confesar que me cuesta un grandísimo trabajo. No porque no desee mostrarle mi sumisión y mi respeto ni porque no lo considere mi Dueño o, incluso, mi guía, sino porque hablar de mí como esta esclava o como su perra, no me sale de dentro y, por tanto, me resulta tremendamente difícil de hacerlo habitual.
Desgraciadamente, ese comportamiento mío, me ha costado no pocas reprobaciones y castigos.