viernes, 24 de junio de 2011

Matrioshka


Una noche, hace ya bastante tiempo, estaba de guardia en el hospital cuando oímos el estrendo de una ambulancia  que llegaba a las puertas de la Urgencia y que iba seguida por dos coches de la policía, también con sus sirenas a todo volumen. Enseguida salieron los celadores, se hicieron cargo de la camilla y la pasaron al Servicio de Urgencias, en el que me encontraba yo con otros compañeros. Me impresionó ver a una chica de unos veinte años, rubia, muy guapa pero a la que habían dado una inmensa paliza. A simple vista, sangraba por la cara y el cuerpo, tenía múltiples moratones y magulladuras, parecía padecer un traumatismo craneo encefálico y tenía fracturadas dos costillas y un húmero.
Decidimo que fuera trasladada a la Unidad  de Cuidados Intensivos para un mejor estudio y evaluación.
Allí fui a verla algunas veces. Enseguida me di cuenta de que apenas hablaba algunas palabras de inglés y que se desenvolvía en un idioma que yo no conocía pero que me sonaba a ruso. Llamé a un compañero que había estado un año en Moscú y pudimos conversar con ella. Nos enteramos de que se llamaba Anastasia Alekseyevna, aunque todos empezamos a llamarla Nastya. Un tiempo después, cuando la mejoría se había hecho evidente, la trasladaron a la planta, al servicio en el que yo trabajaba por el peligro de su traumatismo encefálico.
En el informe que tuve oportunidad de leer ponía que había sido encontrada por unos transeúntes en un callejón y avisada la policía y que todo se debía probablemente a un ajuste de cuentas en el que los agresores pensaron que la habían matado.
A pesar de que iba a verla todos los días no conseguí que me contara muchas cosas, no sólo porque era una chica reservada sino porque tenía un miedo atroz. Me preguntaba por mí y por España y me decía que le gustaría poder ir algún día. Una mañana, sin embargo, cuando apenas faltaban seis o siete días para que le diésemos el alta, se confió conmigo y con mi compañero. Entonces, nos contó que a los quince años su padre la echó de casa y que durante más de un año y medio vivió en la calle, los famosos niños de Leningradisky, mendigando, cometiendo pequeños hurtos, robando en supermercados, inhalando pegamento y, tres veces en aquel año y medio, prostituyéndose haciendo felaciones en un coche, a 300 rublos ¡¡7,5 euros!!en las inmediaciones de la estación de ferrocarril, para conseguir dinero con el que sus amigos y ella pudieran comer. Un día, se le acercó un coche conducido por un hombre joven que le advirtió que no quería un servicio, sino solamente hablar y que le pagaría los honorarios por ello. Le dijo que si no sabía que había organizaciones, allí mismo en Moscú, que se dedicaban a facilitar becas a los jóvenes y a proporcionarles trabajo en el país o en el extranjero que podrían proporcionarle una vida digna.
Nastya era desconfiada pero, después de pensarlo, decidió ir a visitar una de esas Organizaciones. Efectivamente, existían y efectivamente facilitaban becas y trabajos, tanto interiores como en el extranjero a jóvenes sin recursos a cambio de un porcentaje del sueldo. Después de muchas idas y venidas, a Nastya se le pusieron los ojos como platos cuando le dijeron que había un trabajo de camarera en una cervecería de Berlin, con un sueldo de 1.500 €, posibilidad de compartir piso con otras chicas y un curso báscio de alemán. Le facilitaron un pasaporte y le dijeron que en el aeropuerto de Berlín habría una persona de la Organización esperándola. Allí estaba. Le cogió la maleta y le subió a un coche para trasladarla a Berlín. Nastya se deslumbró con el aspecto del centro, tiendas de superlujo,grandes almacenes, pisos y calles, hasta que se dio cuenta de que habían salido del centro y circulaban por la periferia donde sólo había avenidas y bloques destartalados. En uno de ellos pararon.
Subieron a pie las tres plantas y cuando entraron en el apartamento a Nastya se le vino el mundo abajo. Allí había tres hombres y fue entonces cuando se dio cuenta del engaño. Trató de escapar pero fue imposible. Durante esa noche la estuvieron violando sistemáticamente y a la mañana siguiente la vendieron a un proxeneta que había llegado al piso.
Durante más de un año Nastya estuvo prostituyéndose de manera forzada en las calles de Berlín, hasta que un día, su proxeneta le dijo que la habían vendido. La metieron en un coche, la durmieron y cuando volvió a ser consciente estaba en un miserable burdel de Dublín, en el que permaneció otro año y medio con un cliente y con otro y con otro hasta que una noche vio la posibilidad de escapar de aquella pesadilla. Su libertad duró media hora hasta que sus vedugos la arrojaron a un callejón pensando que estaba muerta.
No he vuelto a saber nada de Nastya. Sí que cuando, algunos días después, le dimos el alta, fue deportada a Rusia por ser una inmigrante ilegal. Pero estoy convencida de que en algún momento ha vuelto a entrar, acaso sin saber cómo, en el circuito de las mafias de la prostitución rusa.

jueves, 16 de junio de 2011

Ayer te besé en los labios



Hoy he querido tomar prestado un poema y enviarlo muy lejos, a un lugar en el que alguien, al leerlo, tal vez sepa que he sido yo quien se lo ha enviado


Ayer te besé en los labios.
Te besé en los labios, Densos,
rojos. Fue un beso tan corto,
que duró más que un relámpago,
que un milagro, más. El tiempo
después de dártelo,
no lo quise para nada ya, para nada
lo había querido antes.
Se empezó, se acabó en él.

Hoy estoy besando un beso;
estoy sola con mis labios.
Los pongo
no en tu boca, no, ya no...
¿Adónde se me ha escapado?
Los pongo en el beso que te di
ayer, en las bocas juntas
del beso que se besaron.
Y dura este beso más
que el silencio, que la luz.
Porque ya no es una carne
ni una boca lo que beso,
que se escapa, que me huye.
No.
Te estioy besando más lejos

                                                                                         Pedro Salinas

Nuevo Blog

A todos aquellos que son simpatizantes o admiradores o, incluso, practicantes del BDSM les recomiendo un blog que ha empezado a publicarse y que aunque, aún tiene pocas entradas, me ha parecido particularmente interesante por su diseño, sinceridad y originalidad. Podéis encontrarlo en

                                                www.esclava-noa.blogspot.com

martes, 14 de junio de 2011

Movimiento 15M


Hoy me gustaría escribir de un tema que puede ser comprometido, pues mis opiniones pueden ser compartidas por algunos pero repudiadas por otros. Sin embargo, como he hecho siempre en el blog, quiero mojarme.
Cuando apareció este movimiento, una semana antes de las elecciones autonómicas, una corriente de simpatía me acercó a ellos, hasta el punto de que me hubiera gustado estar allí, en la Puerta del Sol y compartir con ellos algunas de sus pretensiones. Peticiones como acabar con la corrupción, tanto política como no, disminuir con los inmensos beneficios de la banca y de los banqueros cuando medio país está en paro, hacer de los políticos o de la mayoría de los políticos personas preocupadas y dispuestas a hacer lo que fuera, incluso perder su escaño o su puesto en el partido, por favorecer al grupo de ciudadanos a los que representan, introducir mejoras para facilitar el trabajo juvenil y toda una serie de objetivos planteados para mejorar la democracia y la vida de nuestro país, me parecieron encomiables.
Luego, por desgracia, mi opinión fue cambiando poco a poco y conforme fui descubriendo otras cosas. La primera que, junto a todas esas personas que se denominaban a sí mismos indignados, había también un importante número de arribistas, gente antisistema, violentos y personas que lo único que pretendían era llamar la atención. Pero lo más importante para que cambiara de opinión, al menos en parte, fue toda una serie de peticiones o de exigencias que me parecieron descabelladas. Terminar con el paro ¿Por arte de magia? Quitar toda referencia a la Casa Real y al Rey de la Constitución ¿De un plumazo? ¿Sin obervar la ley? ¿Creen de verdad que con la relación de fuerzas que hay en las Cortes iba a ser eso posible? Exigir politicos que representen ¿A quién representan ellos? por lo menos a los Diputadores, senadores, alcaldes, etc se le ha votado democráticamente. El perjuicio que han hecho a cientos de comerciantes que tienen el mismo derecho que ellos a sobrevivir económicamente, las pataletas con la llegada de las policías y sobre todo, el plantarse delante de algunos Parlamentos  co no sé qué excusas.
Estoy convencida de que los fundadores (por llamarlos así) del Movimiento 15M están avergonzados de todo lo que se les ha ido de las manos y por eso han sido ellos los que primero se han ido  para organizarse de otra manera y que lo último que ha quedado han sido esos arribistas, antisistema y aprovechadosq que hay en todos lados. Con muchas excepciones, claro
Y ahora ¿qué? Pues no lo sé, pero daré mi opinión. Ahora nada y la verdad es que es una pena.

domingo, 12 de junio de 2011

Saludos


Hola, soy Silvia y aquí estoy de nuevo tal como os prometi. Lo primero que quiero deciros es que mi vida a dado un giro de ciento ochenta grados, no sólo porque por fin soy libre y no tengo que llevar mi cuerpo atado a una máquina, sino porque otras muchas circunstancias han hecho que todo sea ahora diferente.
Hace unos días que estoy pasando una temporada de descanso en mi tierra, en la provincia de Málaga, en un publo pequeño pero bonito. Aquí estaré hasta que tenga que volver a una nueva revisión, aunque en realidad, no sé muy bien hasta cuándo porque no depende enteramente de mí, sino también de mi familia que es la que ha insistido para que me venga a este lugar y me aleje de los jaleos y la "mala vida" de la capital.
Este blog es la continuación del que ha sido y es mi primer blog. Las cicunstancias son completamente distintas y aunque en un principio dije que daba por terminada mi etapa de esclava y que llevaría aquel blog por otros senderos, después he pensado en dejarlo como estaba, como exponente de esa parte de mi vida y de que el pasado siempre es nuestro y empezar este nuevo que, en realidad, deseo que sea una continuación de aquel, dejando fuera el BDSM.
Aquí hablaré de todo, de temas sencillas y de otros más polémicos, de mi vida, de mis pensamientos y de mis cosas y acaso de las vuestras también. Espero que los que me habéis seguido allí, me sigáis aquí también y que paséis algún rato entretenido con lo que se me ocurra contar.